Comparto este artículo que publiqué en El Salto hace tiempo, que sirvió para que el gobierno se replantease el borrador del Real Decreto sobre la nueva norma de calidad del pan que pensaba implementar.

Desde luego, esa no era mi intención, sólo pretendía denunciar la situación que existía entonces ante una nueva legislación sobre este asunto, pero resultó tener un final más feliz de lo esperado porque dos televisiones se hicieron eco del artículo, y el Ministerio se tuvo que reunir con algunos de los interlocutores que recogí en él, con lo que el borrador de la norma se modificó.

Hoy sigue sin ser perfecta, pero ha mejorado mucho, y algunos de los agentes que fueron invisibilizados pudieron ser escuchados para plantear mejoras.

Alegrías que, de vez en cuando, nos da el periodismo.

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